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Esto lo arreglamos entre todos



Una iniciativa para animar a los que estamos en crisis. Merece la pena visitar la web, y echar un ojo a los vídeos.

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-Empezamos el año en febrero, ¡si señor! ¡con un par!. Yo que ya me daba por muerto...

-Ya sabes, tener tanto tiempo libre es lo que tiene: ganas de nada.

-Pues a ver si me das un par de meneos. Yo que me decía, ¿y esta chica donde andará? Que no comenta ni Gran Hermano, ni Eurovisión, ni la nueva cara de la Esteban ni ná de ná

-Me alegro de que haya ganado Ángel. Flipo con el invento que sacaron los de Tele5 para seguir viendo a Arturito e Indira darle al tema

-Que darle al tema, para verlos follar como leones, que es lo que da audiencia

-Aunque les ha durado menos que un caramelo a la puerta de un colegio.

-Y encima ni folleteo ni nada de nada...

-Daba vergüenza ajena ver al resto de los Grandes Hermanos los primeros días detrás de ellos venga a preguntarles; no sé si es que lo tenían por contrato o es que son tan rastreros que con tal de arañar unos minutos en pantalla le hacen la pelota a quien sea

-¿Por qué crees que les seleccionaron para el concurso?

-Y mira que no meter a nadie de la primera edición, que es la más mítica. Lo que hubiese ganado el invento con Jorge y Maria José...

-dándose de ostias

-¡con lo de "quien me pone la pierna encima"!

- Que tiempos...

-Ni de la segunda edición, con Emilio y Eva que ahora se deben de llevar a matar, aunque se casaron en la casa de GH y fuera. Hace poco ha salido contándolo todo.

-Esa era la tía buena que salió en Interviú ¿Cuanto tardarán en meterla en la casa con Emilio?

-O incluso el Yoyas, aunque no tenga problemas con Fayna, ya van por su segundo hijo

-Ese es al que expulsaron por maltratador

-Vale, con GH3 han dado en el clavo: Raquel y Noemí, aunque también se las han cargado rápido.

-Y casi se matan fuera

-Que penita daba Raquel cuando la explusaron. A ver si la vuelven a meter.

-Y el otro día se cargan a la legionaria, la mejor pareja con Nicky. ¡Qué momentazos!

-Todavía no entiendo por qué la han expulsado del programa. Que poquito ha durado Nicky. Y la pobre Cristal, la salida más rápida de la historia de GH.

-Vista y no vista. Que guapa es esta chica.


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Historias de una petarda - Capítulo 8 - Ella y su suegra

La Petarda nunca tuvo una buena relación con su suegra. El origen de todo, siempre según ella, era que un día la había echado de su casa. Todo esto lo contaba con el mayor dramatismo posible.

Para situarnos, él vivía en un barrio de las afueras de la capital y ella en un pueblo a unos 10 kilómetros. Una tarde estaban en casa del Chupa-chups, en el salón viendo la tele y apareció la suegra invitándola a marcharse. El Chupa-chus se dispuso a coger el coche de sus padres para acercar a su amada a casa, y la madre le debió decir que de eso nada, que se cogiese un taxi.

Supongo que la suegra llegó a casa cansada, con ganas de estar tranquila en su casa, y se encontró a su hijo con una Petarda (por aquel entonces supongo que no llevaban mucho tiempo saliendo); intentó despacharla sin mucho tacto quizás porque estaba enfadada con el hijo, y cuando le pidió el coche le mandó a paseo.

De este incidente la Petarda había creado una montaña de odio hacia su suegra, insultándola, vamos, no se lo decía a ella a la cara porque sabía de sobra la estrecha relación que mantenía con su hijo, pero vamos, cuando me hablaba de ella la ponía de hija de p*!@ para arriba; e incluso a su novio le decía de vez en cuando alguna barbaridad sobre ella. Siempre que tenían alguna discusión un poco fuerte sacaba lo de "porque tu madre me echó de casa y eso no se lo voy a perdonar nunca en la vida...".

La verdad es que la suegra debía de ser bastante posesiva con sus hijos, todo esto por lo que me llegaba de la Petarda y sus interminables charlas telefónicas con su Cuñá, porque nunca tuve el gusto de conocerla. Aunque la mujer debía de tener lo suyo.

La Cuñá era una chica bastante comedida y debía de tener una buena relación con su suegra, precisamente porque no era tan posesiva y territorial como la Petarda (al final creo que la mala relación entre la suegra y la Petarda era, en realidad, una lucha territorial entre ellas). Quizás por eso la suegra aprovechó la docilidad de la Cuñá, para presentarse un día en la casa que acababan de comprarse el hijo y la Cuñá con unos amigos. Imagino la cara de la Cuñá y del hijo, cuando al entrar a la casa se toparon con la suegra y unos amigos de ella.

Esta historia dio para unas cuantas tardes de teléfono, y se convirtió en uno de los hits más escuchados en los Greatest Hits que la Petarda recordaba de vez en cuando. Y lo aprovechó para poner a parir a la suegra y aleccionar a la Cuñá: "¿Ves? Eso te pasa por buena. Es que no sé por qué has dejado que tu novio le dé una llave a la madre... es que tienes que guardar las distancias como hago yo, que si le das la mano te coge todo el brazo... es que es una tal y una cual..."

Todo cambió cuando a la Petarda le interesó. Su querido Chupa-chups quería comprarse un coche, en principio un deportivo, pero claro, eso no encajaba con la vida familiar que ella había planeado. Al final después de muchas vueltas, y vencido por cansancio como casi siempre, el Chupa-chups encontró un coche al gusto de la Petarda. Un cochazo de mucho cuidado, con camarita para aparcar y toda la pesca. Ella pidió la tarde para ir a la entrega del coche, el evento del año, e incluso la obsequiaron con un ramo de flores. Al día siguiente estaba inaguantable.

El caso es que el coche lo compraron en concesionario en el que trabajaba el padre del Chupa-chups para ahorrarse unos durillos, que por lo que comentaba ella fue nada más y nada menos que ¡un millón de pesetas!. Eso si, para poder comprar el coche en esas condiciones, el coche tenía que ir a nombre del padre. Hora del peloteo: cada dos por tres la Petarda llamaba a su suegra para comentarle como iba lo de la compra del coche y tal y pascual. Aunque por detrás seguía poniéndole, aunque menos, a parir.

Entre tanto entusiasmo, en sus momentos de lucidez, comentaba a su Cuñá algo que había escapado de su control. El coche y el préstamo iban a nombre del padre del Chupa-chups, aunque el coche lo estaban pagando a medias entre los dos, a pesar de que lo condujese él y estuviese ganando un pastón como ingeniero, el Chupa-chups era un rata. La mayor preocupación de la Petarda era que si lo dejaban ¿como demostraba ella que la mitad del coche era suyo? Pero claro, un millón es mucho dinero, y bien merece correr el riesgo. Aunque ella lo tenía todo atado y bien atado.

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